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El “gota a gota” que rebosa la taza

El “gota a gota” que rebosa la taza

Por: JOSÉ FERNANDO SERNA O |

“A veces toca porque los bancos no prestan fácil”, escribió Óscar Javier Figueroa. “Yo lo utilizo por la rapidez y la facilidad con que prestan”, justificó Nelson Verpe.

Estas dos explicaciones que llegaron por el Facebook de El COLOMBIANO son de colombianos que dicen estar cansados de buscar créditos en las diferentes entidades bancarias y, por eso, optaron por el préstamo informal que circula en las calles conocido como pagadiario o gota a gota.

Al indagar si han utilizado esta forma de crédito que pulula en las calles de Medellín, los lectores de EL COLOMBIANO justificaron a través de las redes sociales el uso de este mecanismo que, muchas veces, los ahoga por las altas cuotas de intereses pero que les soluciona el problema de dinero de manera rápida.  En Medellín, de acuerdo con la Policía Metropolitana, los combos, de la zona nororiental y noroccidental, han utilizado el préstamo de dineros como método para financiar sus actividades ilegales.

El brigadier general José Ángel Mendoza, comandante de la Región 6 de la Policía Nacional, asegura que “en un 98 por ciento el préstamo gota a gota no lo realiza un ciudadano corriente. Es alguien vinculado a las bandas criminales nutriéndose de esa actividad criminal. Con ese mismo dinero que le recolectan al ciudadano siguen haciendo más préstamos y, cada vez, más presión al ciudadano”.  Pese a que las autoridades han señalado que el hábito de los delincuentes es prestar, cobrar, y si las personas no tienen con qué pagar, intimidar; los ciudadanos señalan que no existe otra posibilidad ante las dificultades que expone una institución bancaria.

“Los bancos de este país no prestan plata fácil. No sirven sino para robar con los descuentos en la cuentas y cuotas de manejo. Que más gota a gota que ese”, escribió en el Facebook de El COLOMBIANO el usuario identificado como Andrés Felipe.

¿Cómo funciona?

Daniel Zapata, otro lector de EL COLOMBIANO, solicitó un préstamo de 100.000 pesos a un pagadiario para cancelarlo en el transcurso de un mes. En su caso tendrá que pagar un interés del 20 por ciento.  Este deudor terminara cancelando al prestamista 120.000 pesos, 20.000 de ellos solo de intereses. Y eso, sin contar que el deudor puede atrasarse en las cuotas.  “Que le presten a usted 100 mil pesos, al 10 y 20 por ciento como lo hemos detectado en los procesos de investigación, es absolutamente una usura, un atraco a mano armada”, agregó Mendoza.  La Superintendencia Financiera es la entidad encargada de fijar la tasa máxima de interés legal que se puede cobrar en Colombia, que para este mes es de 28,89 por ciento efectivo anual, es decir, 2,41 por ciento mensual.

Entonces, con los mismos 100.000 pesos del préstamo, si Daniel lo hubiera hecho con una entidad bancaria, el pago final sería de 102.400 pesos, sin contar cobros marginales de seguros de cartera y otros.  “Nosotros asumimos esta situación del pagadiario como una forma de extorsión. Por eso invitamos a la ciudadanía a que haga la solicitud de dinero por la vía legal”, precisó el coronel (r) Sergio Vargas, secretario de Seguridad de Medellín. Quien cobre directa o indirectamente utilidad que exceda el tope de interés de la Superintendencia Bancaria a cambio de préstamo de dinero incurrirá en el delito de usura, estipulado en el artículo 305 del Código Penal de Colombia, y podrá recibir entre dos y cinco años de prisión o multas entre 50 y 200 salarios mínimos vigentes.

¿Hay solución?

Pero el tema es también cómo lo deben asumir las personas ahogadas por la necesidad de pagar sus deudas. En ese sentido, Ramiro Reyes Páez, director de la firma Ilya Latinoamérica y experto en finanzas personales, llama la atención sobre el analfabetismo que existe en el país a la hora de manejar los ingresos. “No hay un conocimiento claro para manejar el dinero, La mayoría no identifica las diferencias y consecuencias de prestar a una u otra tasa de interés”, añade Reyes. Por eso propone como primera medida personal controlar el flujo de efectivo, y eso parte de tener claro cuánto se gana y, como segunda medida, cuánto se gasta: “estudios recientes demuestran que la gente gasta en promedio 30 por ciento más de lo que se gana”, concluyó el experto.

CONTEXTO DE LA NOTICIA

PARA SABER MÁSNO SE QUEDE CALLADO, DENUNCIE

El pasado mes, la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá presentó la campaña Diga no al gota gota con la que pretende frenar este tipo de extorsión en las calles de los municipios involucrados. Invita a la ciudadanía a denunciar a las personas que utilizan esta actividad ilegal para beneficiar a grupos delincuenciales.

“Frente a estos casos hay pocas denuncias, porque cuando le ofrecen el préstamo a una persona se muestran como unas mansas ovejas, al día siguiente cuando ya tienen que empezar a cobrar, ya son los lobos, ya amenazan con una presión, incluso con arma de fuego en la cabeza para que usted pague, pero pagar en esas condiciones siempre será difícil”, señaló el brigadier general José Ángel Mendoza.

 

PUBLICADO EN EL COLOMBIANO EL 23 DE SEPTIEMBRE DE 2015

https://www.elcolombiano.com/antioquia/seguridad/el-gota-a-gota-que-rebosa-la-taza-CF2755532

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